Apenas era un mocoso con aires de 18 años recién cumplidos, que había agarrado una guitarra con la incapacidad de rasguear y marcar 2 notas seguidas. Soplado una armónica hasta quedar morado como moretón viejo. Y habiendo experimentado el fracaso en una batería con una descoordinación crónica de pies y manos heredada de mi madre que jamás pudo mantener una base de “toc toc”. Pense, supuse y claramente no me informe respecto al BAJO.
Por eso tengo uno. Aquel día acompañado de mi madre fui a esa parte de la ciudad llena de instrumentos de música. Con algún dinero de sobra del viaje de egresados y un poco regalo de cumpleaños.
Entraba a un negocio; preguntaba con timidez y esa voz bien adolescente de pubertad tardía que
cuando trata de sonar adulta y varonil, salía chillona y mujerzuela.
“¿Hola vendes bajos?”
Las reacciones eran varias. Pasaba desde la mirada
despectiva y de poca atención del vendedor que SABIA que lo que tenía era caro y
demasiado profesional para un mocoso que no tenia ni idea de lo que pedía y que
encima lo acompañaba la mamita, hasta la ávida y dedicada atención de un
vendedor inescrupuloso y descarado que SABIA que lo que tenía era caro y demasiado
profesional para un mocoso que no tenia ni idea de lo que pedía y que encima lo acompañaba la mamita.
Pero un detalle se le escapaba al señor vendedor avivado es
que, mi madre y yo teníamos la moneda contada. No nos iba a poder enchufar bajo
ningún concepto un FENDER JAZZ BASS o algo por el estilo.
Fue por eso que fui a lo seguro, un bajo marca Accord.
Fue por eso que fui a lo seguro, un bajo marca Accord.
Un bajo chino, de esos que si llegado el punto que te cansaste del instrumento la incursión por el género, monetariamente hablando, no te va a doler tanto. Pero lo que si te va a doler con un bajo Accord son los dedos, las manos, el alma! A pero eso si, preparate para sacar unos buenos tubos porque con el bajo accord no tocas cuerdas, tocas cables de media y alta tensión!
Aun así le di duro y parejo hasta que me salieron cayitos en todos los dedos. Tanto el esmero que le puse que ante la falta de Internet para ver tablaturas me iba a lo de mi amigo a copiar con lápiz y papel CANCION X CANCION.
Cuando tuve un mango de mas, no perdí la oportunidad de
comprar un libro
“Aprenda a tocar bajo
FACILMENTE”
Hasta el día de hoy está la causa abierta que le inicie al
autor del libro por publicidad fraudulenta. facil el titulo y gracias.
Capaz debería aprovechar que esta de moda eso del “Per saltum” capaz en una de esas algún juez medio frustrado musical me da la razón.
Capaz debería aprovechar que esta de moda eso del “Per saltum” capaz en una de esas algún juez medio frustrado musical me da la razón.
Eso si, pregúntame donde esta “TAL NOTA” y te digo eh! Del
5to traste para arriba.
Hasta la proxima! esperemos que sea mas seguido no?
